Es-baal: un pequeño anclaje de la Biblia en la historia (¿o no tan pequeño?).

Los arqueólogos Yosef Garfinkel, Mitka R. Golub, Ageo Misgav y Saar Ganor han hecho público en el  ' Boletín de la Escuela Americana de Investigación Orienta l' el descubrimiento de una antigua inscripción que recoge uno de los nombres mencionados en la descendencia de Saúl.

No es para tirar cohetes, pero sí merece la pena recopilar la noticia, porque no deja de ser otro anclaje más que muestra la coherencia de los relatos bíblicos con los descubrimientos arqueológicos.

El nombre, Es-baal, aparece en 1ª de Crónicas 8:33 y 9:39, donde se detalla la genealogía desde Benjamín, el pequeño de Jacob.

Hasta ahora no se había encontrado ninguna mención a dicho nombre, y lo que se ha descubierto es una inscripción en una tinaja de unos tres milenios de antigüedad. Estas tinajas (“pithos”) la usaban los cananeos para el transporte de mercancías y como urnas funerarias.

El sitio donde se ha descubierto esta tinaja es una “mina” para los arqueólogos por la cantidad de descubrimientos que allí realizan. No es la primera vez que traigo a biblicamente.org noticias sobre este lugar. Se trata del conjunto de Khirbet Qeiyafa, con un palacio, una ciudad fortificada con un gran edificio que probablemente se utilizó como almacén. Se cree que por allí estuvo ciudad mencionada en 1ª Samuel 17:52 (Saaraim. Ver también Josué 15:36 y 1ª Crónicas 4:31)

Según la datación de los expertos, la tinaja donde se encuentra la inscripción se fabricó entre los años 1020 y 980 antes de Cristo, y dado la precisión del trazado donde se lee Es-baal, probablemente fue realizada por un experto escriba del cuerpo funcionarial.

Explicando lo del "pequeño anclaje"

Es importante destacar que es la primera vez que se encuentra este nombre fuera de la Biblia. Esto aclara la “humilde importancia” del hallazgo y por qué lo llamo “pequeño anclaje” de la Biblia en la historia. Dice el profesor Yosef Garfinkel que  "Esta es la primera vez que el nombre Es-baal aparece en una antigua inscripción en el país. Es interesante notar que el nombre Es-baal aparece en la Biblia, y ahora también en el registro arqueológico, sólo durante el reinado del rey David, en la primera mitad del siglo décimo AC. Este nombre no fue utilizado más adelante en el período del Primer Templo. La correlación entre la tradición bíblica y los hallazgos arqueológicos indican que esto era un nombre común sólo durante ese período”.

En respuesta a aquellos que en alguna ocasión me han sugerido que la Biblia fue escrita siglos posteriores a los hecho sin más anclaje histórico ni otra pretensión que inventar unas historia que dieran fundamento a una religión de pretendidas bases históricas (respuesta que ya di en otras ocasiones a propósito de Qumnrám) les respondo, en esta ocasión "a la gallega", con esta otra pregunta:

¿Qué probabilidades hay de que si alguien se inventa una historia de hace 3000 años mencionando un nombre raro, por ejemplo “Cirobagalondó”, aparezca alguna cerámica de hace unos 3000 años en la que también aparezca grabado ese mismo nombre?

La única explicación es que o bien es un nombre muy habitual desde aquellos tiempos hasta el momento mucho mas tardío en el que ese u otro fantasioso “inventa” la historia ficticia, que no es el caso....

... O que el que escribió la historia la vivió por la misma época o la recibió oralmente de otros que la sí la vivieron realmente por aquella época. Sólo así encuentro razonable esta coincidencia de nombre entre el relato genealógico de Es-Baal como hijo Saúl y el hallazgo de una tinaja de aquella época con ese mismo nombre inscrito cerca de su embocadura

Y ¡ojo!, que no es preciso que el nombre hiciese en su época referencia a mismo hijo de Saúl. Con la sola coincidencia de aparición del mismo vocablo en la Biblia y en la tinaja es suficiente para concluir que aquel relato de 1ª de Crónicas está realmente anclado en hechos reales sucedidos hace unos 3000 años.

¿Y si el anclaje no es tan pequeño?

Pero además, es que hay bases para poder pensar que quizás se refiera al mismo hijo de Saul.

Dice Saar Ganor, director de la excavación en Khirbet Qeiyafa: "Hemos encontrado cientos de frascos en las grandes ciudades de todo lo que fue el Reino de Judá. Este es el único que tiene una inscripción.  El que el recipiente lleve el nombre de este hombre sugiere que era alguien muy especial e importante”.

Pues si de persona importante se trata, quien más importante que este segundo hijo de Saul, que llegó a reinar. Los expertos bíblicos opinan que este al que en 1ª de Crónicas 8: 33 y 9:39 llaman Es-baal es el mismo que en otros muchos pasajes llaman Is-boset (por ejemplo: 2ª Samuel 2:8-10). Y es que no es de extrañar que le cambiaran el nombres, puesto que Is-baal significa nada menos que "hombre de Baal". 

Así, pues, sea pequeño o no tan pequeño, lo cierto es que la arqueología nos ha vuelto a dar un nuevo fundamento para afirmar taxativamente la historicidad de la Biblia.

Puedes leer aquí más destalles del descubrimiento, ya que la lectura completa del artículo de los arqueólogos es de pago y está en inglés. También, en inglés, pero de fácil traducción con Chrome, puedes leer mas ampliamente aquí.